Disco destacado

Björk

UtopiaOne Little Indian-Popstock!, 2017

Rockdelux 368

(Enero 2018)

Bajo

Suscripción

Hace años que Björk Guðmundsdóttir decidió que el mundo de la canción pop le ponía excesivas fronteras a las ideas que bullían en su cabeza. La artista que en los noventa firmó hits como “Human Behaviour”, “Venus As A Boy”, “Violently Happy”, “Hyperballad”, “Possibly Maybe” y “Bachelorette” fue desplazándose hacia terrenos menos radio friendly sin que su personalidad se resintiera, aunque por el camino fuera perdiendo seguidores que no acababan de encajar en las nuevas cartografías de la islandesa. Experimentos como “Medúlla” (2004), álbum centrado casi exclusivamente en las posibilidades creativas de su voz, pueden verse como la antesala de sus entregas en esta década, inaugurada en 2011 con “Biophilia”, un disco bastante incomprendido que buceaba en las posibilidades de las nuevas tecnologías al tiempo que lanzaba señales de alarma sobre la catástrofe ecológica que nos envuelve. Este trabajo, ambicioso, conceptual, inquietante y hermoso (¿qué otros adjetivos se le pueden colgar a piezas como “Crystalline” y “Virus”?), puede considerarse el punto cero de la última Björk, esa que busca la expresión total y duradera, la que rechaza el menú del fast food cultural tan común en los (amplios) segmentos del pop actual.

“Vulnicura” (2015), su “disco de divorcio”, enseñó las heridas de su ruptura con Matthew Barney en un descarnado harakiri emocional que contó con aportaciones de Arca en un diario musical tan doloroso como bello. Alejandro Ghersi es, de nuevo (y con más implicación), cómplice en “Utopia”, el noveno largo de la de Reikiavik (décimo si contamos su debut de 1977, a los 12 añitos) y el más extenso hasta la fecha: su tracklist suma más de setenta minutos. Y no es, por supuesto, un trayecto fácil para el oyente. Restauradas las heridas del álbum anterior (y de forma muy explícita, tal y como escuchamos en “The Gate”: “My healed chestwound / transformed into a gate / where I receive love from / where I give love from”; la última frase que resuena es “love forever” en el cierre con “Future Forever”), Björk propone ahora una especie de sinfonía para un nuevo mundo donde su voz, siempre en primerísimo primer plano (doblada y/o arropada por The Hamrahlid Choir), y un numeroso ensemble de flautistas construyen los cimientos de una utopía lírica y musical donde la naturaleza, la tecnología, el ser humano y la música intentan convivir en armonía.

Diosa utópica. Foto: Santiago Felipe
Diosa utópica. Foto: Santiago Felipe
Arpa (Katie Buckley), chelo (Júlía Mogensen), los beats electrónicos de Arca y numerosas grabaciones de campo (de Papúa Nueva Guinea a Venezuela, pasando por los field recordings de Chris Watson en Islandia) van coloreando y dando relieve a este ritual de purificación física y espiritual donde el poder de la música adquiere una presencia constante (en “Arisen My Senses” hay intercambio de mixtapes; en “Blissing Me” dice textualmente: “He reminds me of the love in me / I’m celebrating on a vibrancy / sending each other mp3s / falling in love to a song”; “Features Creatures” comienza con la frase “When I spot someone who is same height as you / and goes to same record stores / I literally think I am 5 minutes away from love”, y en “Saint” afirma: “Music heels too / I’m here to defend it”) y la naturaleza simboliza el ecosistema ideal para el hábitat del ser humano (“The forest is in me / I immerse me / this is my home”: “Claimstaker”; el instrumental “Paradisia” no necesita palabras para evocar el “paraíso perdido”).

Como una especie de liturgia ajena a los estribillos, “Utopia” va desplegando su mantra con parsimonia y fe trenzando un túnel de enredaderas sonoras que terminan por hipnotizar al oyente. Y lo hace porque, más allá de planteamientos conceptuales, Björk, chamana y demiurga, posee los conocimientos para tocar las cuerdas sensibles (imposible no emocionarse con la repeticiones de ese “I care for you / you care for me” que pueblan “The Gate” o, en “Losss”, cuando afirma que “Loss of love we all have suffered / how we make up for it defines who we are”) y convertir en calor, color y humanidad pulsaciones que podrían quedar congeladas en meros daguerrotipos estéticos. “Utopia is not elsewhere / it’s here”: escuchar es creer. ∎


Contenidos relacionados

2024/ Libros-Pop

Bajo

Suscripción

2024/ Libros-Pop

Pleamar editora
LISTAS DE LIBROS / Por Rockdelux → 17.12.2024

Varios

Björk. Una constante mutación
LIBROS-POP / Por Marta España → 04.12.2024
Björk
Björk

Bajo

Suscripción

Björk

Homogenic
ÁLBUMES / Por Ricardo Aldarondo → Rockdelux 147 (Diciembre 1997)

Bowie, Björk, Eno: música en el museo

EXPOS / Por Jordi Bianciotto → Rockdelux 364 (Septiembre 2017)

Contenido exclusivo

Para poder leer el contenido tienes que estar registrado.
Regístrate y podrás acceder a 3 artículos gratis al mes.

Inicia sesión