Álbum

Morrissey

You Are The QuarryAttack-Sanctuary-BMG, 2004

Rockdelux 219

(Junio 2004)

Exiliado en L.A., Mozzer nos concede en 2004 el privilegio de su mejor disco desde “Vauxhall And I” (1994), cuando más cerca estuvo de The Smiths en la pasada década, enterrando su travesía por el desierto tras el desconcertante “Southpaw Grammar” (1995) y el irregular “Malajusted” (1997), y dejando de lado su borrachera glam-rockabilly, la que lo llevó a “Your Arsenal” (1992) y al directo “Beethoven Was Deaf” (1993); también queda lejos su fijación camp, la de “Kill Uncle” (1991). Adiós a su obsesión por ser el nuevo Elvis.

Como ya hizo con His Master’s Voice para EMI en su debut en solitario con “Viva Hate” (1988), su obra no superada, ha reactivado un label histórico, Attack (propiedad del mítico sello de reggae Trojan; este, a su vez, adquirido por Sanctuary), por razones sentimentales; lo conoció a través de su devoción por Gregory Isaacs, the cool ruler.

Olvidándose de la producción de Steve Lillywhite, habitual en sus tres últimos discos, y apoyado en sus fieles guitarristas Alain Whyte y Boz Boorer, ha confiado, sorprendentemente, en Jerry Finn (productor de blink-182, punk de MTV), quien le ha hecho grabar música y voz al unísono por primera vez en su carrera; Smiths incluidos. Teclados omnipresentes (cortesía de Roger Manning, de Jellyfish), estallidos de guitarras que apabullan por momentos en una ensalada de contrastes (flauta incorporada) pulidita y radiante: un mainstream contundente en la parte dura y sutil en el tran tran electrónico que cimenta la base.

La calidad de “You Are The Quarry” (séptimo LP, título no entrecomillado en la portada por primera vez, exceptuando sus discos recopilatorios) certifica la declaración de principios proclamada en su primer álbum solo: “I’m so glad to grow older”. A sus 45 años, resurge con sus habituales delirios de grandeza estética, propios de un working-class hero siempre crítico (también criticón). “La gente odia con facilidad, y eso no es ni malo ni bueno. El odio es lo que hace que el mundo siga funcionando”, dijo una vez. Y, dándose la razón, arranca a lo grande con las armas cargadas en este “Morrissey, You Are The Quarry” (“Tú eres la presa”; la coma en la frase de portada lo incluye a él, ¿no?), personalizando, valiente, sus mensajes de amor-odio contra las instituciones más elevadas de cielo y tierra: en la tripleta inicial, Estados Unidos, Inglaterra y Jesucristo. Odiar más alto no se puede. Mozzer suspira por ser Dios. O quizá el Diablo. En cualquier caso, sigue siendo una figura capital, un auténtico bicho raro (individualista, exhibicionista, partidario de la acción directa), de la que el pop actual ni puede ni debe prescindir.

Una de las más depuradas combinaciones de egolatría, provocación, sensibilidad y sentimentalismo se dan cita en una obra clasicota (pero también clásica) y nostálgica que juega a fondo la carta de la añoranza-fantasía. Ficción-emoción, sueño y realidad dominados por Mozzer, como demuestra magistralmente en la balada retrospectiva “Come Back To Candem”: la imposibilidad del amor, tema recurrente en su obra.

Cantando mejor que siempre (mayor autoridad, más seguridad), brindando por la liberación de las amas de casa y por los pandilleros heroicos, y maldiciendo a jueces, policías, contables y abogados, transcurre este estupendo disco atemporal. Como el golpe final que lanza el buscavidas que interpreta Paul Newman en “El color del dinero”, regalándose una nueva y quizá última oportunidad, Morrissey is back“At last your life begins”, explica aquí el hombre que no podía imaginarse a sí mismo sin ser famoso. Y sin arrepentimientos: “I’m not sorry for the things I’ve done”. Un triunfo. ∎

Compartir

Contenidos relacionados

2024/ Libros-Pop

Bajo

Suscripción

2024/ Libros-Pop

Pleamar editora
LISTAS DE LIBROS / Por Rockdelux → 17.12.2024

Contenido exclusivo

Para poder leer el contenido tienes que estar registrado.
Regístrate y podrás acceder a 3 artículos gratis al mes.

Inicia sesión