Rock’n’roll y avant-garde, clubes y galerías de arte, pop art y drogas duras… Los accidentes ocurren y, tal y como Todd Haynes expone en su documental, The Velvet Underground fueron uno de esos “felices errores” surgidos de la vivificante escena artística del Nueva York de mediados de los 60, un accidente que marcó la cultura pop del siglo pasado y cuyos ecos continúan resonando en nuestros días.
Este doble CD, complemento sonoro al filme (estrenado en Apple TV+), se detiene en algunos de los momentos más representativos del grupo de Lou Reed, John Cale, Maureen Tucker y Sterling Morrison (y Nico, claro), además de ofrecer muestras escogidas de las influencias que llevaron a la banda a construir un sonido fuera de norma en una época dominada por la contracultura hippy y los mandamientos del flower power.
Aquí está el doo-wop de NOLAN STRONG & THE DIABLOS (“The Wind”, single de 1954 en Fortune), el aquelarre rock de BOB DIDDLEY (el “Road Runner” en directo que cerraba “Beach Party” en 1964), un fragmento cedido por La Monte Young con su THE THEATRE OF ETERNAL MUSIC interpretando “The Fire Is A Mirror” en diciembre de 1963 y, también, el mordisco enloquecido de “The Ostrich” (single de 1964) de THE PRIMITIVES, grupo efímero de Reed, Cale, Tony Conrad y Walter de Maria y uno de los gérmenes que desembocó en VU, además del “Chelsea Girls” que Reed y Morrison le entregaron a NICO para su LP de debut como solista (“Chelsea Girl”, 1967: álbum del que la alemana siempre renegó por el maquillaje orquestal que el productor Tom Wilson añadió en contra de sus deseos).
El protagonismo del resto del tracklist de “The Velvet Underground. A Documentary Film By Todd Haynes” es, por supuesto, para los protagonistas de la historia y ofrece una ojeada veloz a algunos de los momentos icónicos de la banda: “Venus In Furs”, “Heroin” (en la versión mono original), “I’m Waiting For The Man”, “Sunday Morning”, “Sister Ray” (directo de 1967 en el Gymnasium neoyorquino), “Pale Blue Eyes”, “Foggy Notion”, “After Hours” (live en The Matrix de San Francisco en 1969, una de las muestras de su pesadillesca excursión californiana), “Sweet Jane”, “Ocean” y “All Tomorrow’s Parties”: rock crujiente y obsesivo, poesía asfáltica y narcótica, belleza, dolor y transgresión: VU con (y sin) Cale y Nico, con un Lou Reed en plena visión dispuesto a convertirse por todos los medios necesarios en uno de los songwriters fundamentales del canon de la música popular. ∎
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