Bajo
Suscripción
“Soy una camiseta mal secada que huele a perro, un cigarrillo mal enrollado que se deshace en tu mano, una rueda de repuesto lisa y desinflada”, canta con furia Michel Cloup mientras una manos entran y salen de plano para zarandearlo, pintarle los labios y echarle harina por encima. “Soy un póster de GG Allin en una boutique de lujo”, vocea el francés, primerísimo primer plano y verbo supersónico, en este autorretrato a la inversa que Mònica Jové, colaboradora habitual de los salvajes Tiger Menja Zebra, transforma en incómoda foto fija de un humorístico secuestro en el que la presa, la víctima, es también el homenajeado. Ojalá todas las colaboraciones se resolviesen así. David Morán
Si Clara Viñals utiliza todo tipo de metáforas y simbolismos en su single de este año, la directora Angie Bolea, con producción de Canada, ha hecho lo mismo, en paralelo, a nivel visual. Juega con vestuario, luces, colores y objetos para tomar los sentidos por asalto. Recurre a una pantalla vintage para mostrar los featurings de Sami Galbi y Bendriss, y utiliza una tostadora de pan, una taza de café, hielo, un pimiento, naranjas… para completar líneas como “El llit desfet com una raclette ens estirem com un xiclet / Bassa d’oli, fritura em menges com tempura”. También usa el chicle, por cierto, para rendir homenaje al plano más recordado de “Tres colores. Rojo” (Krzysztof Kieślowski, 1994). David Saavedra
En manos de Espanto, el reinado del automóvil y su arraigo en las conversaciones más familiares se convierte en sainete vial a ritmo de rumba. Stanley Sunday –que ya ha trabajado antes con ellos y con Hidrogenesse, Fangoria, etc.– lo convierte en imágenes de una forma que parece que la canción no existiría sin el vídeo. El realismo de filmación doméstica de extrarradio, con una Picasso con matrícula del grupo como estrella invitada, deviene fantasía surreal con la multiplicación de Teresas y Luises entrando y saliendo, paseantes de canes, boquetes, mangueras de gasolina, efecto moviola y un final con los dos sentados, tan frescos, sobre el techo del coche peor aparcado del planeta Tierra. Pepe Nave
“Misil” puede no ser la mejor canción de “Elige tu propia aventura”, pero este himno de amor planetario de sarcasmo punsetero captura a la perfección el costumbrismo localista de la banda y al mismo tiempo la ambición de salirse de su terreno que define en general su tercer álbum. En el videoclip, dirigido por Nicolás Feriche, los Carolina Durante dejan Madrid para pasar un día loco de concierto en Barcelona. Y todo el viaje, toda la noche, se sucede en un frenético y entrecortado stop motion provocado por el alcohol y el éxtasis: la Razz, pillar unas latas en un paki, arreglarse y beber en el metro, liarse en un taxi y acabar bañándose mientras amanece en la Barceloneta porque no te han invitado a ningún after. Diego Rubio
“Tocotó” rinde homenaje al “Corre, corre caballito” que su admirada Marisol interpretó en “Un rayo de luz” (Luis Lucia, 1960), mientras se hace eco de los procesos acelerados a los que los músicos se ven cada vez más abocados. Esa idea también se filtra en las imágenes que deposita Daniel Dalfó (Daniel 2000) en el tema de la pamplonesa. De entrada, adoptando el formato vertical impuesto por las principales redes sociales. Esos espacios que promulgan el scroll infinito y donde la pausa, la dilatación y la reflexión son un estorbo a erradicar. También la realidad, alterada entre filtros, porque la verdad sucks, como anuncia esa camiseta en la primera viñeta del videoclip. Marc Muñoz
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El asunto arranca en una exposición museística para todos los públicos… y con su punto “realista”. La propia Paula Ribó se pone en la piel de una guía que lleva a cabo un tour con los visitantes. Lo excepcional salta en escena cuando la cámara cruza el vidrio de las marquesinas para resolverse en dioramas vivientes, en los que se reproducen las actividades que llenan de placer mundano a la artista catalana. Esas mismas que expresa con la letra. Así, los espectadores asisten a una instantánea de juegos de playa con su hijo, una cerveza con la amiga que hace tiempo que no ve o un menú de los caros con su pareja que termina en un extraño paseo. Abiertas las trampillas a la madriguera carrolliana, la pieza se va sumergiendo en lo onírico y fantasioso a medida que avanza su recorrido. Marc Muñoz
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Buenas dosis de humor e imaginación son las que aplica Pere Sala para configurar las imágenes de este “Com està el pati”. Un tema que supone un viraje estilístico de la banda, también desde la parcela estética, como confirma la obra producida por Play Your Brand. En esta alojan una crítica no velada a la industria musical, en concreto se desprende cierto desagrado con los compromisos comerciales y las obligaciones con discográficas de cierto tamaño. Algo que queda representado con este trío que dirige el videoclip dentro del videoclip. Especialmente un inflamado realizador (Adrián Núñez Pérez), que acapara los momentos más divertidos. Una operativa visual festiva e hilarante que, sin perder de vista la esencia de la banda, los recoloca en este nuevo viraje estilístico que abre su nuevo disco. Marc Muñoz
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Una pieza que se aleja del molde del videoclip para emanciparse como un cortometraje con entidad propia. Los temas “Els llibres” y “Avui”, extraídos de su nuevo LP, son la pauta sonora para el trabajo escrito y dirigido por Pablo Maestres bajo la guía de un Palau que no ha escatimado en presupuesto para darle el acabado soñado. El dispositivo estético diseñado por Maestres trenza evidentes complicidades para cualquier aficionado al cine de aventuras de los ochenta. Toda la escenografía, vestuario y diseño artístico refuerzan esa conexión con el cine yanqui de décadas pretéritas. “E.T., el extraterrestre” (Steven Spielberg, 1982) es quizá la referencia más obvia, aunque no la única: “Donde viven los monstruos” (Spike Jonze, 2009) u otras aproximaciones a géneros como el drama, la comedia o el terror. Marc Muñoz
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El recorrido del vídeo se fija en la jornada que vive un chaval marroquí obsesionado por los coches y las carreras que emula con el joystick en su hogar. A medida que transcurre el día, sus anhelos de velocidad y libertad se irán concretando. Rodado en Marruecos, en Uarzazate, la obra rezuma veracidad en su retrato de esa juventud marroquí de las poblaciones rurales del Atlas que colindan con el desierto del Sahara. La estética busca el realismo, casi el documental si no fuera por el frenético montaje a rebufo de los muchos BPMs por los que circula el tema. A ese acercamiento naturalista, con barniz cinematográfico, le favorece el look que aporta la película Kodak de 16 mm, así como el uso de talento local no profesional y las localizaciones en bruto, sin intervención de los departamentos artísticos. Marc Muñoz
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Desde la parcela audiovisual, cuidada desde sus primeros gateos, la gaditana imprime solvencia. Para dar forma a este “mangata” recurre a los servicios de Nono + Rodrigo, un tándem de realizadores asentados en Londres –Nono es español, Rodrigo es brasileño-japonés– y representados por la prestigiosa agencia Partizan. Ellos entremezclan la tradición andaluza y el imaginario judeocristiano con el desenfreno, la rave y el latir juvenil. Una correspondencia con la propia propuesta de la joven artista, la que liga sin estridencias el folclore con la electrónica y el R&B.
Por su parte, la función visual recurre a la simbología religiosa y gótica, al contraste del blanco pulcro de Judeline y el negro de ese comando de mujeres inquietantes vestidas con cobijás (traje de Vejer de la Frontera que data del siglo XV) que la acompañan y a los ambientes cerrados y hasta tétricos para lanzar un relato de amor y desamor marcado por presagios y señales.
En el look que se evoca en las escenas ligadas a la representación religiosa, en su búsqueda de un acabado cinematográfico, sobrevuelan sombras de “El espíritu de la colmena” (Víctor Erice, 1973) o “Cría cuervos” (Carlos Saura, 1976). Aunque esa puesta en escena inspirada por ciertos clásicos del cine español de los setenta queda pronto desacatada por esos pasajes de desenfreno fiestero y la realización contemporánea: dolly de seguimiento, planos volteándose, flashes. Es ahí cuando el estilo de la dupla de realizadores parece alinearse con la guía visual de The Blaze. Marc Muñoz
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2001 Nacho Vegas Seronda (Ramón Lluís Bande) / 2002 Beef Platinum (Marc Lozano) / 2003 Manta Ray Take A Look (Benet Román) / 2004 Camela Cuando zarpa el amor (J. A. Bayona) / 2005 Refree La reina de les neus (Gerard Casas y Clara Puig) / 2006 Christina Rosenvinge A Liar To Love (Luis Cerveró) / 2007 Los Planetas Alegrías del incendio (Luis Cerveró) / 2008 Joe Crepúsculo Suena brillante (Luis Cerveró) / 2009 Kiev Cuando Nieva Sal (Orencio Boix) / 2010 El Guincho Bombay (Nicolás Méndez) / 2011 Nacho Vegas La gran broma final (Jonás Trueba) / 2012 Los Punsetes Alférez provisional (Canada) / 2013 Fernando Alfaro Extintor de infiernos (Vicente Gil Ginestar) / 2014 Los Punsetes Me gusta que me pegues (Canada) / 2015 Manos de Topo Un último esfuerzo (Alejandro Marzoa) / 2016 Aliment Razors (Luis Cerveró) / 2017 Rosalía De plata (Manson) / 2018 Rosalía Malamente (Cap. I Augurio) (Nicolás Méndez) / 2019 Rosalía De aquí no sales (Diana Kunst y Mau Morgó) / 2020 Ferran Palau Flora / Caic (Pablo Maestres) / 2021 Maria Arnal i Marcel Bagés Fiera de mí (Joan Galo) / 2022 Rosalía Saoko (Valentin Petit) / 2023 C. Tangana Oliveira dos cen anos (Antón Álvarez) ∎
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