as “Vitafonías” (de vitáfono, un sistema antiguo de cine sonoro para adherir la banda sonora a las películas) serían apariciones, manifestaciones o fenómenos musicales a partir de los cuales se revelan asuntos importantes. Mensualmente descubriré unas cuantas en películas y series en esta nueva sección.
“I Know This Much Is True” (“La innegable verdad”; 2020; HBO)
Director y guion: Derek Cianfrance (novela: Wally Lamb)
Música: Harold Budd
Capítulo: 1
Minuto: 05:52. Interior de un hospital
Dominick Birdsey apoya finalmente a su hermano Thomas, esquizofrénico, cuando implora que no le intenten coser la mano que se acaba de serrar él mismo en la biblioteca pública. Suena “The Serpent (In Quicksilver)”, una pieza de pianos flotantes de Harold Budd grabada en 1981. Entonces él no lo sabía, ni nosotros, pero estaba compuesta para el minuto 05:52 de esta historia de belleza y tristeza cósmica. Derek Cianfrance tenía 5 años, como yo, en 1981. Esa música permaneció suspendida, en órbita, hasta 2020. (Quizá solo Stephen Hawking lo sabía y quiso que fuera una sorpresa).
“Primal” (2019; Adult Swim-HBO)
Director y guion: Genndy Tartakovsky
Música: Tyler Bates y Joanne Higginbottom
Capítulo: 4
Minuto: 00:02
Heavy metal clasicista, como de cómic de los 80, pero hecho score. Se funde con una cabecera de extrema simplicidad gráfica, de austeridad prehistórica. En el segundo 30 hay un breve respiro sintético con eco, para dar pie y protagonismo al color rosa frío del pasto y del horizonte onírico. Enseguida se retoma redoblado el heavy metal adherido a una estampida de dinosaurios. Si hay unas secuencias donde creo que el músico de cine y TV tiene que estar muy atento para no caer en clichés ni en torpes redundancias es en las de acción. Si no, todas evocarían a Tom Cruise corriendo, da igual la película. El score de “Primal” es perfecto para contemplar recursos retrofuturistas identitarios de sencillez engañosa.
“The Staggering Girl” (2019; MUBI)
Director: Luca Guadagnino
Guion: Michael Mitnick (idea: Pierpaolo Piccioli)
Música: Ryuichi Sakamoto
Minuto: 12:00
Francesca llega a Roma para visitar a su madre, ya mayor. Suena la pieza “Casa” de Ryuichi Sakamoto, una compresión de toda la banda sonora: ambient y pianos mínimos que contienen varias vidas en cada pasaje. La hija camina con un poncho que se confunde con los árboles y con la arquitectura de belleza impactante. La fragilidad de la música es el diván donde la protagonista parece retrotraerse a su niñez con vahídos. Minuto 32:44. “Did you see it?”, pregunta la madre. Empieza el track “Dance”, un baile anticlimático con trajes de Valentino, que levitan en un jardín de palmeras y bambú sin necesidad de epílogos ni significado ocultos.
Para poder leer el contenido tienes que estar registrado.
Regístrate y podrás acceder a 3 artículos gratis al mes.