Que el trap no es tanto un género musical como un código o una filosofía vital se confirma definitivamente en
“Élite”, el lanzamiento más largo hasta la fecha en la carrera de
La Zowi, quizá el nombre de la escena urbana nacional al que menos material le ha costado diferenciarse. Pocos momentos durante los veinticuatro minutos que dura la
mixtape encajan fielmente en esa plantilla trap que ya nos habíamos aprendido de memoria: esto es otra cosa. Casi es más fácil imaginar su presentación dentro de la programación de un festival de electrónica avanzada que en uno de propuestas derivadas del rap. Que a su socio habitual Mark Luva, un verso suelto en el panorama de productores de aquí por su tendencia industrial, se le sumen otros
beatmakers particulares como Jam City, Based Kash o el tándem Sinjin Hawke-Zora Jones (con la que ya trabajó en “Obra de arte”) termina resultando en un lenguaje propio difícil de ubicar.
“Élite” tiene apariencia urbana, sí, pero sus nueve cortes nos recuerdan que una ciudad suena de muchas formas diferentes en 2020. El relato queda marcado por el tema de apertura y el de cierre: de
“Fulana” a
“Boss”. La Zowi le canta al lujo y el dinero como alguien que no siempre lo ha tenido a mano.
“Tengo de to’, doy gracias a Dios. Voy con un papi, Christian Dior”, dice en
“Filet Mignon”. Ahora tiene, además, una obra adelantada que debería convertirse en una plantilla a usar por los que vengan. ∎