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TOP 2024

2024/ Canciones internacionales

Menudo repaso

Se asume que entresacar la miríada de canciones que han pasado por nuestras orejas durante el último año es tarea abocada al fracaso, pero aquí venimos a jugar, así que estas son las cincuenta que, por muy distintos motivos, más nos han gustado.

19. 12. 2024

Bajo

Suscripción

Fontaines D.C. plantea en su álbum “Romance” nuevas vías de desarrollo para la corriente principal del rock, y la fínísima “Starburster” es buen ejemplo de ello. Tan bueno que ha sido capaz de birlarle el cetro a una Charli XCX a la que pocos han podido hacer sombra en 2024 gracias a canciones como “Girl, So Confusing”. Ya que hablamos de sombras, hagámoslo del fantástico regreso de The Cure, fieles a lo suyo pero con extra de inspiración en canciones como la monumental “Alone”. Leal a su espíritu también se muestra Kim Gordon con “BYE BYE”: la sempiterna juventud sónica de una septuagenaria dando sopas con honda a la mayoría. Y en el primer disco en solitario de otra venerable, Beth Gibbons, pervive un gen artístico capaz de hacernos levitar, como en “Floating On A Moment”.

Los cinco primeros hitos de la lista son más que representativos: distintas generaciones de creadores y muchos géneros, procedencias y materiales de trabajo en juego. Lo que viene después amplía una panorámica en la que se atisba de todo: pop mainstream de aroma retro difícil de mejorar e indie rock palpitante llamando a las puertas del futuro; artilugios country-pop para coreografiar en línea y bombas colindantes con el trance para romper cualquier pista de baile; góspel-rock preñado de épica existencial y ejercicios de estilo retro para alimentar radiofórmulas y tops virales; clasicismo soul cinco jotas y psicodelia vocal de poso existencial; caminos alternativos para el k-pop y merengue veraniego para todos los públicos; no wave de nuevo cuño y jazz ultraterreno… De Chappell Roan a Alan Sparhawk y de Beyoncé a Mavis Staples, pasando por LISA, Kendrick Lamar, Pet Shop Boys o Nick Cave & The Bad Seeds. Esa es la gracia con las canciones, cada cual puede elegir su propia aventura, trazar su propio itinerario para el disfrute, ya sea individual o colectivo. César Luquero

50

Fabiana Palladino

I Can’t Dream Anymore

Escuchado sin contexto, el debut de Fabiana Palladino podrá parecer perfectamente una reedición de un álbum perdido de R&B blanco de finales de los ochenta. En ese terreno se mueve “I Can’t Dream Anymore”. “La escribí durante un período del primer confinamiento en el que me quedaba despierta hasta muy tarde. Me dedicaba a escribir canciones para el álbum yo sola y la intensidad y la irrealidad de todo empezó a afectar mi sueño”, ha explicado la autora sobre una canción posteriormente coproducida junto a Jai Paul, a quien Palladino también ha acompañado como corista y teclista en su banda en directo. Víctor Trapero

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49

Erika de Casier

Lucky

El año pasado, la danesa Erika de Casier coescribió una de las canciones pop más destacadas de 2023: el hit azucarado de k-pop "Super Shy", de NewJeans. Esa experiencia parece haberle dado un mayor enfoque pop a sus excavaciones románticas montadas en beats de Jersey club y R&B dosmilero. “Lucky”, de su tercer disco solista “Still”, captura el momento en un nuevo amor cuando desaparece esa típica preocupación de que las cosas parecen ir demasiado rápido. Cuando la voz aterciopelada de De Casier repite “another night” en una coda celestial de drum’n’bass líquido, es imposible no mimetizarse con el sentimiento de simplemente querer más. Gabriel Orqueda

48

Charli XCX feat. Billie Eilish

Guess

El tema original incluido en “brat” ya era una bomba, un hit hiperadictivo apoyado en la producción de The Dare –con guiños al “Technologic” de Daft Punk– y una letra que se adentra en vericuetos realmente guarros para, en última instancia, reflexionar sobre la intimidad y la celebridad en la cultura pop. Pero su guiño clave estaba en la parte en que Charli canta: “Podrías remezclarla / Enviársela a The Dare, sí / Creo que está en ello”. Ahí anticipaba el remix estelar de “brat and it’s completely different but also still brat”. En realidad, un dueto en la cumbre con Billie Eilish para propulsar aún más arriba la canción. David Saavedra

47

yaeji

booboo

Es una composición sobre “Raingurl”, su primer hit –¿quizá el único?–, y sobre cómo la sobrexposición consecuente al éxito la hizo alejarse de la cultura de club y el circuito de DJs. Sobre una base de techno-dance cuyo bombo parece un latido que sufre de arritmias fruto del estrés, la neoyorquina no se martiriza por haberse tomado un pequeño descanso para regresar más adelante, y de aquí proviene el mantra del single, recitado en su lengua materna, el coreano: “Si te sientes muy cansado, vete a casa”. También como guiño a toda esa audiencia que tiene la obligación de cerrar el club como si fuera su trabajo. Marta España

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46

Vegyn feat. John Glacier

A Dream Goes On Forever

Dos sensibilidades afines de la joven generación londinense, Vegyn y John Glacier, se encuentran en esta espectral letanía de IDM. Blood Orange meets DJ Shadow, es un decir. Economía de recursos para una balada minimalista que comienza, sample mediante, con una llamada religiosa a Dios para después, en los versos del rap abstracto y ultracool de Glacier, bajar a tierra laica apelando al mismo asunto: las necesidades místicas del ser humano persisten, con o sin “muerte” de Dios, porque el misterio persiste. El camino al infierno está pavimentado con buenas intenciones, nos recuerda el título del álbum que se abre con esta canción que concluye, de nuevo sample mediante, con la “Plegaria de la serenidad”. Pepo Pérez

45

The Last Dinner Party

Sinner

Levantado el Damocles del hype, penetremos en el peliculón que se ha montado este quinteto. Aunque “Sinner” sea un hit directo, de pocos rodeos. No por nada segundo single del disco de debut, contiene las virtudes que han hecho emerger a Roberts, Morris, Nishveci, Davies y Mayland de entre todas las personas: lírica ardiente (I wish I knew you / When touch was innocent / I wish I knew you / Before it felt like a sin”), toque Sparks, voces impecables que se elevan con una plegaria y una lead guitar que se gusta en su preciosismo: Roberts, discípula de Brian May desde chica. Temazo, sí señoras. Isabel Guerrero

44

Kamasi Washington

Prologue

Fue carta de presentación de un doble álbum que, paradójicamente, vino luego a cerrar. Un torbellino de sensaciones, pilotado por la hermosa partitura del maestro Astor Piazzolla, cuyos ocho minutos largos condensan la filosofía musical del músico angelino a través de un percusivo ritmo con ecos drum’n’bass y de un desarrollo en crescendo impulsado por las tórridas intervenciones de la trompeta de Dontae Winslow y, sobre todo, del saxo tenor del líder. Pura energía interpretativa que amplía cobertura e impacto de la mano del vídeo dirigido por AG Rojas y coreografiado por Samantha Blake Goodman. Salvador Catalán

43

Jack White

Bless Yourself

En su último disco, “No Name”, el audaz guitarrista de Detroit ha seguido una de las más recurrentes leyes no escritas del tracklisting: la que dice que hay que colocar el mejor tema en segundo lugar. Ahí suena este indisimulado guiño-guiño a los Kinks con un riff a lo Davies cada vez más cargado de fuzz y apoyado en una sección rítmica digna de un hit de Rage Against The Machine que, con el añadido de White vociferando a lo Zack de la Rocha, contagia un subidón de pura fiereza rockera para cagarse en Dios o al menos para reivindicar que “si está demasiado ocupado, me bendeciré yo mismo”. Nacho Serrano

42

Cassandra Jenkins

Devotion

Tras el duelo, la sanación. No confundas desesperación con devoción, nos dice. Confirmación creativa de una mujer que estuvo a punto de dejarlo todo justo cuando ya nos había avisado de que su singular alquimia entre pop, folk, jazz y ambient merecía capítulo aparte. El rasgueo de su guitarra acústica desbroza el camino para que discurra su sobresaliente tercer álbum, y lo hace como si fuera su “Sunday Morning” (The Velvet Underground) particular: no es de extrañar que la cierre diciendo que “luego vino el resplandor de una sola vela a través de las persianas en el sol naciente”. Derroche de sensibilidad y delicadeza. Carlos Pérez de Ziriza

41

Arooj Aftab

Raat Ki Rani

Dice Aroof Aftab que es su canción preferida de “Night Reign”, la que da título al álbum en lengua urdu. Lógico, ya que expande su música hacia una nueva dirección, sin perder la identidad. Entre lullaby y canción de amor, es un gazal que vira a downtempo, con una melodía que la convierte en la Sade pakistaní, rebajando para bien su vocación experimental; con detalles ambient, de música del mundo y jazz, y unos arreglos que combinan electrónica, piano y cuerdas celestiales con los sintes de Shahzad Ismaily. Y la primera vez que utiliza Auto-Tune le sirve para acentuar unos melismas muy emotivos. Ramon Súrio

40

Yard Act

We Make Hits

“Hacemos hits / Dos hombres millennials arruinados / Y lo haríamos de nuevo”. Así se las gastan Yard Act en la canción estrella de su segundo disco. Y es cierto: los británicos facturan éxitos, pero a su manera. Con melodías oblicuas pegadizas, pero nunca obvias. Con el particular (y encantador) acento de Yorkshire de James Smith, cantante del cuarteto. Con un fraseo que se mueve a medio camino entre un Mark E. Smith del nuevo siglo e Ian Dury. Divagando sobre la vida en su país con la dosis justa de vitriolo y acidez. Estaba por ver si eran capaces de pasar la reválida del difícil-segundo-disco. Con canciones como “We Make Hits” lo han superado con nota. Nacho Ruiz

39

The Smile

Don’t Get Me Started

Comienza con una larga introducción a cargo de un riff de sintetizador que rebota en el estéreo hasta que la lúgubre voz de Yorke aparece defendiéndose de vete-tú-a-saber-qué acusaciones: “No soy el asesino / No me hagas empezar / No soy el villano / Elige a otro”, advierte. Ritmos y acordes que van haciéndose cada vez más oscuros y espesos subrayan esta actitud defensiva, que termina dando paso en la parte final del tema a una sección minimalista que sobrevuela la melodía y que podríamos considerar un homenaje a pioneros de los sintetizadores analógicos como Terry Riley o Laurie Spiegel, antes de llevar el tema a su desvanecimiento final. Jesús Rodríguez Lenin

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38

Party Dozen

Money & The Drugs

Es un azote a la enésima potencia de distorsión, ruido y frenesí rabioso. Y todo lo que anticipaban los adelantos anteriores, “Wake In Might” y “The Big Man Upstairs”, se queda corto con esta brutalidad nacida de los momentos más furiosos de la no wave y que aturde desde el mismo segundo cero con un paroxismo similar al de la que siempre había considerado la canción más bestia de la historia del rock: “Don’t”, de Dinosaur Jr. Si dijera que supera a la burrada compuesta por J Mascis en 1988, mentiría; sinceramente, creo que es imposible llegar tan al límite. Pero desde luego este otro nuevo intento de demoler lo que quede de la civilización occidental se le acerca mucho. Todavía no me he atrevido a subir el volumen del amplificador más allá del 40%, por si estas frecuencias desatan la Tercera Guerra Mundial. Jesús Rodríguez Lenin

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37

Nia Archives

Crowded Roomz

Todo lo que hace Nia Archives remite a la golden era del jungle y el drum’n’bass británico. En el vídeo de “Forbidden Feelingz” aparecían pósteres de esos años e incluso salía un momento “Untrue” de Burial como referente. El clip de “Crowded Roomz” arranca también con una bandera colgada en una habitación donde se lee “A quintessentially junglist summer”. La productora y vocalista de Bradford iniciaba este 2024 con otra muesca más del constante homenaje y puesta al día del jungle; un sonido y un estilo tan natural y lógico que parece mentira que nadie antes lo haya hecho igual que ella. Carles Novellas

36

Jessica Pratt

Life Is

Canciones que te llevan a territorios que, seguramente, nunca pisarás. Entre los vapores instrumentales que ponen sonido a una tarde de playa del pacífico en invierno, herederos de esa nostalgia turbia que le debemos a Phil Spector, Jesssica Pratt se marca un soberbio ejemplo de ucronía en el cual las girl bands nunca se fueron y el muro de sonido sigue mandando. Más allá del cuidado del detalle y de su voz perenne y sin edad definida, “Life Is” es un ejercicio de estilo que crece hasta lo sublime, perpetuando fórmulas que se pensaban caducas porque, no importa la fecha, la música es emoción. Alex Serrano

35

Geordie Greep

Holy, Holy

Es posible que “The New Sound”, el debut en solitario de Geordie Greep, haya acercado al ex de black midi al melodismo del pop. Pero esto, lejos de representar una concesión, solo reforzó su idiosincrasia como compositor. “Holy, Holy” se construye sobre una progresión relativamente sencilla (la referencia armónica podría ser, increíblemente, “Cosmic Girl” de Jamiroquai), pero el contrapunto es una puesta rítmica increíblemente compleja, donde la subdivisión es groovera y los hits están corridos. Las formas libres de Greep pueden fusionarlo todo: disco, metal, samba, bongos, incluso ecos de Steely Dan. Bartolomé Armentano

34

Waxahatchee

Right Back To It

Lanzado con el anuncio de “Tigers Blood”, este sencillo destaca el lado más colaborativo de Waxahatchee. Katie Crutchfield se complementa perfectamente con MJ Lenderman, quien aporta guitarras y armonías que evocan los duetos country de raíces, como los de Gillian Welch y David Rawlings, acompañados por el sólido banjo de Phil Cook. Creado entre bastidores en una gira con Jason Isbell y Sheryl Crow, no es una oda al amor fácil ni al confort de lo predecible, sino al acto de redescubrir lo extraordinario en lo cotidiano, un “cheque en blanco” del amor incondicional de una pareja siempre presente. Ana Dara Peña Giraldo

33

Karol G

Si antes te hubiera conocido

Acostumbrada a los éxitos, la popstar Karol G logró que, en 2024, todos bailaran al ritmo del merengue. El sencillo “Si antes te hubiera conocido” marca un punto de inflexión en su trayectoria con el reguetón, ya que expande su sonoridad y la consolida como una de las reinas del verano. Aunque tiene una base musical lineal, sin giros radicales, la canción se queda en los oídos por su letra casi platónica y su videoclip, grabado en la sencillez de un bar karaoke. Es un momento de brillo y frescura que, además, nos ayuda a olvidar los desazones del estreno siguiente, “+57”, un fracaso resonante. Guilherme Araujo

32

Kali Uchis feat. Peso Pluma

Igual que un ángel

Pese a quedarse Kali Uchis sin premio en los recientes Grammy Latinos, “Igual que un ángel” –escrita por la propia Karly Marina junto al español SpreadLof– es desde enero de 2024 el cuarto single de “ORQUÍDEAS”, su cuarto álbum y número uno directo en la lista Hot Latin Songs de Billboard. Una balada en la que la sensación mexicana Peso Pluma –en modo coquette– empaca perfectamente con la voz y estilo neo R&B de la artista estadounidense. La línea de bajo sensual, los elementos retrolatinos de synthpop que aportan sus productores y un liberador estribillo terminan de hacerla deliciosamente contagiosa. Evocando su floreciente etapa, sin sacrificar femineidad por poderío, habiendo cumplido una década tras su debut. Miguel Tébar A.

31

Julia Holter

Evening Mood

La enésima prueba del talento sobrenatural de Julia Holter es una inmersión en un océano de sonoridades líquidas impulsado por líneas de bajo serpenteantes, un clarinete subacuático y un surtido de teclas pulsadas desde el epicentro del más dulce de los sueños. A través de tan celestial crisol de sonidos en perpetuo movimiento, Holter articula su discurso sobre la transformación de las especies a partir de una muy sugerente oda al canon dream pop progresivo. Una vertebrada desde dos extremos imperiales: la mutabilidad barroca de Kate Bush y el flujo naturalista de Kaitlyn Aurelia Smith. Marcos Gendre

30

Jamie xx & Robyn

Life

Lejos quedan los tiempos en que utilizábamos la música para recuperar la vida que la pandemia nos había escamoteado. Pero, si en algún momento tienes una bajuna vital, tan solo necesitas ponerte esta “Life” en la que Jamie xx no solo trae el “Revelacion. House Of The Rising Sun” de Cerrone hasta el siglo XXI, sino que enrola a Robyn para que cante “You’re giving me first kiss, you’re giving me walk of shame, you’re giving me strong torso”… La primera vez que lo escuchas, te tronchas. Después te das cuenta de que representa el 99,99% de tus noches de fiesta. Así que te dedicas a bailar. Y ya. Raül de Tena

29

Artemas

i like the way you kiss me

Nadie supo verlo llegar, pero “i like the way you kiss me” se coronó como uno de los recuerdos musicales de este 2024. Avivado por su viralidad, el tema de Artemas fue capaz de aunar consenso entre perfiles irreconciliables. El mérito se lo adjudicó un joven artista británicocihipriota admirador de Kurt Cobain, la darkwave y de esos Crystal Castles que golpearon otras noches sin fin. Sonido de after vaporoso a punto para la descarga de libido. Pieles en contacto exudando MDMA. Un himno de club oscurecido que arranca con el estribillo, sin preliminares, y que cuando te quieres dar cuenta ya te está dando un beso de tornillo. ¡Vaya si había “attached”! Marc Muñoz

28

Taylor Swift feat. Post Malone

Fortnight

En tiempos de darle al random en playlists, del escuchante picaflor, Taylor Swift reta a sus fans en 2024 con el concepto larga duración elevado hasta la atrofia con “THE TORTURED POETS DEPARTMENT”. Puede parecer fanservice solo apto para swifties, pero mantiene el don de la diva para entregar himnos de confesiones personalísimas como motor creativo. “Fortnight”, además, abunda en el gusto de Swift por los duetos con un Post Malone oficiando de perfecto acompañante. Juntos se encaraman con suavidad por otro tronco melódico marca de la casa, con narratividad melancólica y crescendo sutil. Octavio Beares

27

LISA

Rockstar

Es un homenaje a la identidad que su discográfica ha tratado de ocultar a lo largo de su trayectoria pero, por primera vez, desde una perspectiva y para una audiencia occidental. Viene acompañada de una superproducción audiovisual grabada en las calles de Bangkok en la que LISA visibiliza a las mujeres tailandesas. El elemento clave: la piel morena, tanto en ella como en el resto de figurantes, demandando lo mucho que ha tenido que blanquear su aspecto en la industria surcoreana. Es una de las pocas canciones del mainstream surcoreano que no cumple los estándares del k-pop. Se convierte en un producto exquisito en tanto que cumple todos sus objetivos: trascender Corea, o mimetizarse con Europa, a través de la moda del folclore vanguardista y guiños a nuestro canon. Marta España

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26

Iron And Wine feat. Fiona Apple

All In Good Time

Una llamada al sosiego en el tiempo de la inmediatez. Tras cinco años sin editar un largo, Sam Beam se hizo con algunos de los colaboradores de Fiona Apple para la creación de “Light Verse”. También contó con la compositora, cuya voz él define como “un milagro que suena como un sacrificio y un arma al mismo tiempo”, en este “All In Good Time”, para conformar un dueto añejo y reflexivo. Ambos animan a una madurez apacible con un medio tiempo delicioso, adornado con sutiles arreglos de piano y cuerdas y con reminiscencias a piezas setenteras como el “Loving Arms” de Kris Kristofferson y su entonces pareja Rita Coolidge. Carlos Marlasca

25

FKA twigs

Eusexua

“Eusexua” es el pináculo de la experiencia humana, una sensación de euforia y de bienestar sensual total. Es también el pórtico de entrada a la nueva era techno de FKA twigs, aunque, de momento, de techno no tiene tanto y sí mucho de un trance progresivo cargado de glitches firmado por el productor de culto Koreless (aunque también se esconde entre los créditos Sasha, progressive house master). En definitiva, la culminación en muchos sentidos de su proyecto: la recuperación del poder a través de la vulnerabilidad, la colisión de lo sagrado y lo profano y la negativa a confinarse en el género o la expectativa. Álvaro García Montoliu

24

Amyl And The Sniffers

U Should Not Be Doing That

Una composición de pulso funk introducida por una línea de bajo bien gorda sobre la que Amy Taylor despliega su desafiante perorar sin prisa ni pausas. Esa contención interpretativa de la cantante contrasta con el invectivo contenido de una letra de reafirmación profesional y personal: mientras ella rulaba por medio mundo haciendo lo suyo con los suyos, siendo ella misma, los detractores seguían en Melbourne, Tasmania o Sídney opinando sobre cómo debería conducir su vida. Además de la interpretación de Taylor, la canción destaca por el desarrollo instrumental de su segunda parte, con guitarras de creciente abrasión y el saxo de Harry Cooper evocando brevemente a Steve Mackay en el “Fun House” (1970) de The Stooges. César Luquero

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23

Alan Sparhawk

Can U Hear

La canción, un mantra sintético con la voz de Sparhawk totalmente vocoderizada, es “un exorcismo cuyo propósito no es desterrar el espíritu sino liberarlo” y otra contundente muestra de que el músico no se cierra a la experimentación y al riesgo, algo que siempre guió los pasos de Low. Producida por el propio Sparhawk mano a mano con Nat Harvie –atención a su “New Virginity”–, la canción avanza un álbum audaz e inquietante, algo que queda muy patente en el vídeo realizado por Rick Alverson (ex-Spokane), firmante de largos tan inclasificables como “The Mountain” (2018). Juan Cervera

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22

The Lemon Twigs

My Golden Years

Fue el aviso rotundo e inapelable de que 2024 iba a ser al menos el año dorado de los hermanos D’Addario, su explosión definitiva, su seducción a jóvenes de fanclub y maduritos melómanos. Y la canción que los define como verdaderos creadores de gemas pop, más allá del revival y la imitación erudita de ídolos setenteros. Un derroche de vitalidad desde el primer riff decididamente new wave, con celestiales armonías Beatles en el puente, de estos veinteañeros sabios y conscientes de que el tiempo pasa rápido y hay que aprovechar el momento de brillo. Cantan a la confirmación de sus sueños con puro gozo. Ricardo Aldarondo

21

St. Vincent

Broken Man

“What are you looking at?” (¿Qué estás mirando?), pregunta una y otra vez Annie Clark, desafiante y “rota”, a punto de arder en el videoclip y, quizá por eso mismo, empoderada. Asumiendo por primera vez la producción, el primer single de su séptimo álbum, “All Born Screaming”, ya deja ver el giro más oscuro, crudo y sucio (alejada del productor Jack Antonoff), con un blues-rock industrial de combustión lenta pero implacable. Una insidiosa línea de bajo sirve de ancla a su reproche de convulsión contagiosa, entre quiebres de sintes metálicos, guitarra distorsionada y la certera batería de Dave Grohl. Susana Funes

20

Mavis Staples

Worthy

Hace un año, Staples anunciaba su retiro. Otra leyenda del mundo del góspel y la lucha por los derechos civiles desaparecía. Sin embargo, este verano nos ha sorprendido con el single “Worthy”, que nació como homenaje a Prince, quien colaboró con ella en los discos “Time Waits For No One” (1989) y “The Voice” (1993). La canción es un soul contemporáneo que juega constantemente con el pop y una pegadiza cadencia funk de fondo. El uso de distorsiones vocales y Auto-Tune junto a la limpieza del tema dan la impresión de que la cantante escapa de la rugosidad góspel, pero sin perder nada de expresividad o calidez. Daniel P. García

19

Pearl Jam

Dark Matter

Intro de batería, estricto riff hard rock: en apenas diez segundos, los que dan inicio al single con que Pearl Jam anunció su nuevo disco, la banda sorteó el rutinario no-lugar al que parecía abandonada desde hacía un par de décadas para templar lo apuntado en “Gigaton” (2020) e incluso destilar el aire menos sobrecargado de ese espacio en el que todos parecen esperar, el arco que cubre desde “Ten” (1991) hasta “Vitalogy” (1994). “Dark Matter”, el tema, exhibía por sí solo músculo suficiente para situarse en primera línea del rock más sólido y marcar un ansiado regreso a la relevancia. Felipe Cabrerizo

18

Lady Gaga & Bruno Mars

Die With a Smile

Sin miedo a hacer el ridículo, este par tiene memoria histórica para crear una de las mejores canciones del año, juntando ética amorosa con estética musical. Ambos se dan un homenaje en un show ficticio de la tele de los sesenta, con atrezo country y alta sensibilidad retrosoul. Nada mejor para un músico que controlar el texto y el envoltorio. Cuando Mars y Gaga cantan “If the world was ending, I’d wanna be next to you / If the party was over, and our time on Earth was through / I’d wanna hold you just for a while / And die with a smile”, el mundo del pop escucha y atiende cómo hay que morir con estilo. Miquel Queralt

17

Pet Shop Boys

Loneliness

El aparato orquestal de “Loneliness” trae a la memoria otros hits eternos y grandilocuentes de Pet Shop Boys como “New York City Boy” o “Left To My Own Devices”, pero, lejos de sucumbir al plagio de sí mismos (sin dejar de sonar estrictamente a sí mismos), Neil Tennant y Chris Lowe desentrañan el dilema del erizo de Schopenhauer a lomos de un ritmo palpitante y sintetizadores arpegiados, asistidos por las manos expertas de James Ford en la producción. Tan apta para los salones de un palacio imperial como para la pista de Danceteria en 1984, “Loneliness” atestigua que, 40 años después, Tennant y Lowe siguen en estado de gracia para conjugar grandes melodías y verdades profundas. Juan Monge

16

Nick Cave & The Bad Seeds

Wild God

Reconecta con la faceta más corpórea y rítmica del grupo sin prescindir de una arquitectura compositiva compleja, ya que en la primera mitad hay varios cambios de tempo y del tono interpretativo del jefe. Tampoco se proscriben los copiosos arreglos que caracterizan a los Bad Seeds, que van cayendo como lluvia del porvenir sobre las primeras estrofas hasta que, un poco más allá del tercer minuto, explota un coro góspel acompañando a un despliegue de cuerdas –con guitarras de lija en el canal derecho– a tope de épica. Después, el gigante australiano declama: “Somos dioses salvajes, nena, somos dioses salvajes / Soy un dios salvaje, nena, soy un dios salvaje / Allá vamos, vamos a la cuna de África / vamos a Rusia, vamos a China / a los Estados Unidos de América / Sí, moviéndonos alrededor del mundo; sí, moviéndonos como un enorme y bello pájaro”. Lo hace poco antes de que la canción se esfume en un rápido fundido que sugiere lo infinito de ese vuelo, la continuidad de un viaje que ojalá tenga más escalas como esta. César Luquero

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15

Two Shell & FKA Twigs

Talk To Me

Aquí tenemos algo más de tres minutos de beats ultraacelerados por cortesía de Two Shell, con pausas que dan paso a riffs de teclados, a los que se suman arreglos inteligentemente esparcidos por todo el track y desarrollos tranceros muy melódicos en los que la voz de FKA twigs, convenientemente tratada, nos guía hacia un beatífico estado de euforia. Una canción idónea para ser compartida con propios y extraños en pistas de todo el planeta, en la que los dos núcleos creativos implicados hacen honor a su buena reputación artística, convergiendo en un todo verdaderamente contagioso, oxigenante y bailable. César Luquero

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14

Adrianne Lenker

Sadness As A Gift

Dámelo todo, mami. Dame toda la nostalgia que lleves. Dame ese rasgueo country suave, como empapelado en violines, con el que la lluvia podría convertirse en lágrimas perlando mi rostro, irradiando la tristeza de un recuerdo bello. Tal vez moribundo. No ahogues esa voz, Adrianne. Esa voz nasal. De chica tristona peleando a la contra de la rendición. Rindiendo homenaje a la dulzura. Aunque sea cruel. Aunque sea injusta. Dame más de esa plegaria que humedece mis párpados y me convierte en un hombre tembloroso. En un niño barbudo. Si tu regalo es la tristeza, yo a cambio te doy mi melancolía. Galo Abrain

13

Billie Eilish

LUNCH

La nunca previsible Billie Eilish se nos come en esta oda safista que celebra la estimulación del sexo femenino a ritmo de bases bailables y un piano juguetón en su “HIT ME HARD AND SOFT”. Nos entra susurrando “que podría comerse a esa chica para almorzar, sí la que baila en mi lengua” y, dicho esto, el festín es completo con una subida de adrenalina y un final oscuro como si ya estuviéramos en la digestión nocturna. Su hermano Finneas lo borda en la producción y Eilish nos demuestra que no solo encarna como nadie el espíritu del tiempo, sino que es la cara opuesta del odio que asola su país. Vicenç Batalla

12

Beyoncé

TEXAS HOLD ‘EM

Un caramelo honky tonk que invita al baile (¡cómo no!) y que reivindica las raíces de unas músicas casi siempre asociadas al sector blanco de Estados Unidos. Con el protagonismo del banjo de Rhiannon Giddens, sus adhesivos silbidos (cortesía de Andy Griffith) y la voz de Bey en perfecto estado de revista, el tema es un apañado aliño de country y soul, cromado y sin rastro de polvo, calor o tornados. Probablemente no haga subir ningún peldaño en el podio de la de Houston, pero lo que es seguro es que nos espera una tormenta de botas de piel, sombreros de cowboy y fiestas de line dance. Y no olvides aparcar tu Lexus cerca del saloon. Juan Cervera

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11

Nilüfer Yanya

Like I Say (I runaway)

Grabada junto a Wilma Archer, partenaire creativa de Nilüfer Yanya –en su currículo también se pueden encontrar los nombres de Sudan Archives, Jessie Ware o Bullion–, la canción tiene toda la madera de hit instantáneo, tres minutos al galope de un ritmo repetitivo y contagioso, un estribillo imbatible que va repitiendo el título del tema y, en el centro, unos arañazos de guitarra eléctrica que harán temblar de envidia a St. Vincent. Según Yanya, “Like I Say (I runaway)” trata sobre el valor del tiempo y cómo este se nos escapa de las manos: “El tiempo es como el dinero, nunca lo recuperarás”Juan Cervera

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10

Olivia Rodrigo

obsessed

Coescrita por Rodrigo junto a su colaborador habitual Dan Nigro y con nada menos que Annie Clark (St. Vincent), cabe preguntarse por qué “obsessed” se quedó fuera del tracklist original de “GUTS” (2023), puesto que conecta perfectamente con la temática y el estilo general del álbum: guitarras de ecos grunge, estribillo magnético y toneladas de despecho con una letra que habla sobre estar obsesionada con la ex de alguien. Puro Olivia Rodrigo, en definitiva, que llega con el complemento visual dirigido por Mitch Ryan y convenientemente ubicado en un concurso de belleza entre decadente y tenebroso. Aleix Ibars

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09

Vampire Weekend

Capricorn

En comparación con el jolgorio de jam band de “Father Of The Bride” (2019), el quinto álbum de Vampire Weekend suena casi a funeral. Y alcanza el punto máximo (u óptimo) de melancolía en “Capricorn”, bella balada sobre hacerse mayor, o incluso demasiado mayor, que suena un poco a versión en cámara lenta, con rasgos sonoros casi hauntológicos, de los Vampire Weekend del principio, tan nervudos, tan pizpiretos. Para sorpresa incluso de sus mejores fans, la mediana edad está sentando bien a Ezra Koenig y los suyos, de los que ahora esperamos con ansia sus discos (aún más) crepusculares. Juan Manuel Freire

08

Sabrina Carpenter

Espresso

En un mundo tan intenso e inquietante como el que nos ha tocado vivir, se agradece esta gominola de superficialidad revestida al mismo tiempo de empoderamiento femenino. Sabrina Carpenter, otra chica Disney, va ya por su sexto álbum, aunque es finalmente ahora cuando su delicioso pop intrascendente ha explotado a nivel global. “Espresso”, con su caprichoso uso del lenguaje, es la promesa de un verano eterno convertida en música, el hedonismo sublimado en una irresistible combinación de pop, funk (con guiños a Zapp) y disco music. Y con una melodía que acaba transformándose en un runrún adictivo. Luis Lles

07

Kendrick Lamar

Not Like Us

Sí, el beef llegó a destiempo. Y sí, quizá el intercambio de golpes bajos entre Kendrick Lamar y Drake reverberó como un espectáculo mediático grotesco. La contienda egomaníaca de dos gigantes en pleno crepúsculo de toda una era del rap estadounidense. Pero hay que valorar poco a K.Dot, su posición ya histórica en el hip hop, como para no entender que el asunto va mucho más allá de un simple y banal diss. Aupado por una producción fiestera de Mustard anclada a esa Costa Oeste unificada por Lamar, “Not Like Us” funciona como himno popular –uno corrosivo como nunca antes se había visto, logrando que unas acusaciones de pedofilia sean coreadas alegremente en el hood o en el club; el hit del verano más incómodo de la historia– y como clavo final a la tumba reputacional de la estrella canadiense, tildado de colonizador cultural en un tercer verso en el que se encuentra la verdadera chicha: esto es, también, la confrontación entre dos formas de entender el hip hop y su cultura. Las sombras de Mr. Morale siempre arrojan algo de luz. Anton Casas

06

Chappell Roan

Good Luck, Babe!

Supone un pos-single en una nueva etapa donde la cantante no se enorgullece de cumplir sus expectativas primigenias, esa búsqueda del éxito tan común en los orígenes de un proyecto, sino tan solo de seguir intentándolo. Se trata de una composición que, en la línea drag queen y los principios queer que rodean todo el proyecto de Roan, versa sobre los vínculos emocionales en sexualidades disidentes. Explora las complejidades en las relaciones afectivas de identidades no cis. Se nota la mano de Nigro, si bien el corte brinda una producción nostálgica, más cercana a la canción de promenade dance y al sofistipop. Marta España

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05

Beth Gibbons

Floating On A Moment

Suspendido en un momento. Así se siente uno al dejarse sanar por Beth: “Flotando sobre un momento, no sé cuánto tiempo / nadie lo sabe, nadie puede quedarse en él”. Yo sí: desde que en febrero escuché esta ambrosía –valiente, contenida, arreglo justo: flauta, figura de bajo, lejana percusión; orquestada por Gibbons, James Ford y Lee Harris (ex Talk Talk)– y supe que, POR FIN –los tiempos de flotación de Beth son inescrutables–, existiría su primer disco solista. Decir que la voz es protagonista es redundar, pero apuntalan a la diosa unas voces blancas que eternizan el sentimiento, armonizando al final con Gibbons: “Vamos hacia ninguna parte / todo lo que tenemos es el aquí y el ahora”. Obra maestra. Luis Miguel Flores

04

Kim Gordon

BYE BYE

Resulta que “la chica del grupo” era la más atrevida y visionaria, incluso por encima de su extodo, un músico tan influyente como Thurston Moore. Eso, que las mujeres se adelanten, ya es habitual. Eso otro, que en plena madurez se pueda estar en la avanzadilla del rock como contenedor de música contemporánea, ya casi también. “BYE BYE” fue el impecable e implacable adelanto del segundo álbum de Kim, muestra rotunda de su carácter inquietante y de su inquietud artística. Electrónica intimidante de oscura base trap, voces fantasmagóricas, semirrobóticas, arrebatos guitarreros de estridencia cautivadora, un texto que retrata la confusión del presente... ¿Se puede ser más puta-ama? Javier Corral “Jerry”

03

The Cure

Alone

Sus casi siete minutos de duración no decepcionan al consumar los cánones del rock gótico ambiental evolucionado a dream pop con una brillante melodía. Así, una breve estridencia, como de aserradora Halloween, inaugura el corte justo antes de que asomen la batería, entre marcial y funeraria, una guitarra eléctrica en trémolo a lo Cocteau Twins, un sintetizador denso y atmosférico, quizá un melotrón imitando cuerdas, algún sonido electrónico casi imperceptible y un piano otoñal manchesteriano, recreando un dramatismo denso donde los instrumentos van y vienen, sin perder tensión y exaltación en ningún momento, todo sobre una melodía que acaba de configurarse cuando entra la voz de Smith. José Manuel Caturla

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02

Charli XCX

Girl, So Confusing

Cuando Charli dijo en ‘The Face’ que “brat” sería “confrontacional”, estábamos lejos de imaginar hasta qué punto. Más allá de toda esa corriente electrificante que lo recorre, su caos y sus estridencias, sus bajos toscos y sus sintes glitcheados, letras como la de “Girl, So Confusing” indagan en las relaciones endogámicas de la fama o el interés de hacer funcionar ciertas amistades, reflexionan sobre una industria que conduce a las mujeres a la inseguridad y la rivalidad y al mismo tiempo explicitan un carácter apelativo y a la vez críptico. “No creo que no mirar a la cara a todas las mujeres te haga una mala feminista”, dijo en ‘Las Culturistas’. “Hay competitividad entre nosotras. Envidia. Camaradería”. Diego Rubio

01

Fontaines D.C.

Starburster

Siempre inteligentes y poéticos, Fontaines D.C. se acercan por primera vez al art rock con “Starburster”, y también juegan con la electrónica. Cuando Grian Chatten –sobre un paisaje sonoro nocivo, cada vez más penetrante en cada golpe de batería– casi rapea “I’m gon’ hit your business if it’s momentary blissness” (“Voy a atacar tu negocio si es una felicidad momentánea”), acompañado de una angustiosa inhalación de aire, conecta con el hip hop de sus vecinos KNEECAP, con quienes colaboró en “Better Way To Live”.

Fontaines D.C. reflexionan por encima de todo sobre la identidad y la pertenencia, desde un lugar muy determinado en el mundo. Chatten ha explicado que reescribió la letra de “Starburster” tras un ataque de pánico sufrido en la estación de tren de St. Pancras de Londres mientras se dirigía al estudio. Y entre las fuentes de inspiración del nuevo disco, “Akira” (Katsuhiro Otomo, 1982-1990), fascinado el letrista por la posibilidad de encontrar el amor mientras el mundo se va al carajo. “Starburster” fue la primera canción de los dublineses desde el disco en solitario de Grian Chatten. También el primer tema junto al productor James Ford (Simian Mobile Disco). Cesc Guimerà

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Fueron las mejores...

1986 R.E.M. Fall On Me / 1987 Suzanne Vega Luka / 1988 Prince Alphabet Street / 1989 Public Enemy Fight The Power / 1990 Deee-Lite Groove Is In The Heart / 1991 R.E.M. Losing My Religion / 1992 Khaled Didi / 1993 US3 Cantaloop (Flip Fantasia) / 1994 Youssou N’Dour & Neneh Cherry 7 Seconds / 1995 Goldie Timeless / 1996 R.E.M. E-Bow The Letter / 1997 Primal Scream Kowalski / 1998 Pascal Comelade & PJ Harvey Love Too Soon / 1999 Armand Van Helden U Don’t Know Me / 2000 Madonna Music / 2001 Missy Misdemeanor Elliott Get Ur Freak On / 2002 Missy Elliott Work It / 2003 Beyoncé (feat. Jay-Z) Crazy In Love / 2004 Franz Ferdinand Take Me Out / 2005 Rufus Wainwright The One You Love / 2006 Gnarls Barkley Crazy / 2007 Rihanna (feat. Jay-Z) Umbrella / 2008 Coldplay Viva la vida / 2009 Animal Collective My Girls / 2010 Caribou Odessa / 2011 M83 Midnight City / 2012 Frank Ocean Pyramids / 2013 Daft Punk Get Lucky / 2014 Sia Chandelier / 2015 Kendrick Lamar King Kunta / 2016 Rihanna (feat. Drake) Work / 2017 Lorde Green Light / 2018 Childish Gambino This Is America / 2019 Billie Eilish bad guy / 2020 Bob Dylan Murder Most Foul / 2021 Fred again.. (feat. The Blessed Madonna) Marea (We’ve Lost Dancing) / 2022 Stromae L’enfer / 2023 Olivia Rodrigo vampire ∎

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