De Cass McCombs, favorito de la canción de autor con tendencia al asociacionismo heterodoxo, se podría esperar cualquier cosa, pero no esto. No ahora. Venía el californiano del mágico y aventurero “Heartmind” (2022), crisol de folk panorámico y pop pata negra, y de pronto cambia de velocidad, de dirección e incluso de carretera para pasarse a la música infantil. Pop para críos que, y ahí está la gracia, puede (y debe) disfrutar toda la familia.

En realidad, y pese a lo que anuncia el título, este mano a mano entre McCombs y su amigo de la infancia Greg Gardner (aka Mr Greg), profesor de preescolar y compositor primerizo, va más allá de las canciones para niños y se convierte en un artefacto narrativo de primer orden. Un disco que arranca pisándole los talones al Lou Reed de “Hangin’ Round” mientras sigue el rastro de una simpática lombriz y echa el cierre entre volutas de violín, hipnótica línea de bajo y despedidas multiculturales.

Por el camino, 45 minutos de arreglos imaginativos, música nutritiva y canciones sobre el lenguaje, los derechos civiles y la flora y la fauna. Sobre Harvey Milk y Ruth Bader Ginsburg. Sobre los amigos, los aviones de papel, los músculos que se ejercitan con el ejercicio y la manera correcta de reciclar. Asuntos aparentemente menores que McCombs y Mr Greg elevan para dignificar el pop para niños y sumarse con notable alborozo a la celebración del 75º aniversario de sello Smithsonian Folkways.

Y todo sin abandonar el carril de la sencillez y la accesibilidad y, sobre todo, sin renunciar a una riqueza estilística que conecta el folk polvoriento con el pop instantáneo. Ahí están, para entretener infancias, alimentar viajes espaciales de dormitorio y enloquecer a los cazadores de estribillos, los coros hermandunianos de “Together With You”, el coqueto zumbido de “Who Are You?”, el alegre traqueteo de esa “We Build A Lot Of Muscle As We Exercise” que suena como los Moldy Peaches en pleno ataque de cosquillas, el boogie asmático de “Roll Around Downtown” y el cálido folk coral de “Wave A Flag For Harvey Milk”. Canciones como soles que no cambiarán la historia del pop pero que arrancarán más de una sonrisa y estimularán unas cuantas neuronas. ∎