“PO2054AZ” es una trilogía. En junio del año pasado veía la luz el volumen 1, subtitulado bajo el nombre de “El origen”, en el que Sen Senra narraba, desde un punto de vista autobiográfico, la tradición gallega en relación con su trayectoria. Ahora se publica el segundo volumen del álbum, que lleva como segundo nombre “El emigrante”.
El significado es doble: efectivamente, Sen Senra es un emigrante en terreno nacional, y echa de menos su tierra natal. Sin embargo, más allá de su relación con el territorio, Sen Senra deja de ponerse en primer plano para dedicarle el álbum a sus padres. A través de ellos, el compositor traza una afinidad con todos los gallegos que tuvieron que emigrar a tierras hispanoamericanas hace un par de generaciones para labrarse un futuro mejor. El cantante homenajea, primero, a su familia, pero también a todos aquellos que se fueron para nunca volver. La trilogía toma su título, de hecho, de la matrícula del primer coche de su padre.
Pese a ello, la presencia de música celta y/o norteña es prácticamente inexistente. “PO2054AZ Vol. 2” combina R&B con otros ritmos latinos, y si acaso se acerca a Galicia es a través de las letras dedicadas a su familia o amigos. Llega a parecer que la narrativa del emigrante hila fino para poder coquetear con el reguetón y la bachata, y no al revés: es la contracolonización latinoamericana la que le da a Senra la idea, con el fin de poder adentrarse en una ola sonora dominante con un discurso de morriña más profundo.
Así, el disco se encuentra dividido en cuatro partes, cada una de ellas separada por un mensaje de audio de sus abuelas: Abuela Lala y Abuela Fela aparecen en los créditos del álbum como compositoras. Cada uno de los mensajes es una carta de preocupación narrada desde la distancia, un intento de contactar con un nieto en ocasiones cegado por la fama y, por tanto, un poco ausente: “Mandanos algo, ¿vale? (…) chao, muchos besiños”, “Onte preguntoume o señor cura, a ver dónde andabas” o “si te hace falta algo de dinero para el piso o algo nos avisas, ¿vale? (…) porque como no podemos hablar contigo ahora…” son algunas de las preocupaciones (o curiosidades) que las familiares de Senra le transmiten en ambos idiomas. Por tanto, el disco se construye sobre la añoranza, pero a través de una forma que no parece bidireccional. Aunque Senra articule la comunicación en torno a la morriña consecuencia de la emigración, sus canciones recurren a los tópicos de los excesos consecuencia de ser un personaje público: “Me encandilan los coches y las luces (…) obsesionado en convertir todo en oro”, canta en “New Me”, “Flashes, lujo, diamantes, hoteles, suites gigantes” en “Mis amigos opinan lo mismo”, o “Tengo la receta que genera tu adicción, si miro pa’abajo y bajo el brazo agarro un avión” en “YE YE”.
Senra también interviene en un par de audios. El primero se apoda como “Para los que llegan tarde - Interludio”, en el que narra la historia de un hombre que abrió un camino entre las silvas (término gallego para referirse a las zarzamoras). ¿Es él el hombre que abre el camino a los que llegan tarde? ¿O sus abuelas se lo abrieron a él gracias al trabajo duro? El discurso centrado en el poder del resto del álbum parece indicar, más bien, lo primero. El segundo poema aparece en la primera estrofa de “No se preocupe”: “Me vio caminando por la calle y pensaba que andaba como sin rumbo, me vio con la cara seria y pensaba que estaba enfadado. Fue después, al verme llorando, que me preguntó si algo me pasaba”. En “PO2054AZ” hay mucho texto declamado porque, en general, hay mucha densidad. El álbum cuenta con 24 tracks y casi una hora de duración, y aunque tanto texto ayude a ordenar el concepto puede pecar en ocasiones de pretencioso.
En cualquier caso, los pequeños monólogos ayudan a dividir el contenido: en el primer bloque domina el pop, las texturas de osciladores, los acordes lush y el R&B minimalista. A este pertenece, por ejemplo, “Hermosa casualidad”, su colaboración con Aitana, que una vez se compara con el resto de tracks incluidos en la publicación no destaca como uno de sus mejores temas. A medida que avanza el minutaje, sin embargo, Senra incurre en lo latinoamericano: “Recorrerte”, junto con Carín León, es una balada casi bachatera; “YE YE” se construye sobre un ritmo de clave cubana, y “Llorando x 1”, junto a MC Dricka, parte de un funk carioca. Por último, la parte final del trabajo es acústica, emocional y de tempo lento. Ahí se aglutinan “Romper la curiosidad” junto con Juan Habichuela Nieto, “Quiero decirte” o “No se preocupe”: canciones mucho más cercanas al “Ya no te hago falta” de su primer disco, a esa transición discordante entre el Sen Senra que hacía garage rock y su nuevo yo (otra forma de retrotraerse a los orígenes).
Así, “PO2054AZ (Vol. II)” es un álbum sobrecargado de información: la morriña de unas abuelas que hablan en galego, las colaboraciones que aportan el toque latino para homenajear a todos aquellos que emigraron al otro lado del charco y el regreso a los orígenes del proyecto para echar la vista hacia su tierra natal son los pilares fundamentales. Sin embargo, la narrativa de excesos, oro, fama y poder hacen que el homenaje se pierda en favor del personaje. “El emigrante” es un regalo hacia un pueblo, pero el artista no para de charlar sobre su propia trayectoria: el sonido es ajeno, el beneficio es propio. ∎
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